Una ola de violencia extrema contra mujeres dispara las alarmas en Perú
En 2021 hubo 136 feminicidios en Perú; en 2022, 137, y en los primeros tres meses de 2023, 40. Solo en marzo, una mujer fue asesinada cada 3 días.
Una ola de violencia extrema contra niñas y mujeres ha sacudido en las últimas semanas Perú, un país ya acostumbrado a altas cifras de violencia sexual, pero también con una amplia tolerancia social a los ataques machistas y unas autoridades que parecen olvidarse de las víctimas.
Una lamentable lista de sucesos se desencadenó en apenas días, en los que dos mujeres fueron quemadas vivas por sus parejas o exparejas; un “influencer” confesó una violación grupal entre risas de sus amigos; una niña fue violada y brutalmente agredida, y una enfermera fue violada por sus compañeros de trabajo en un hospital.
“En cada caso, vamos viendo que las fallas están en una institución, en otra, en un actor, en otro, pero en el fondo cada caso da cuenta de un sistema que no está funcionando”, afirma a EFE la defensora del pueblo, Eliana Revollar.
En 2021 hubo 136 feminicidios en Perú; en 2022, 137, y en los primeros tres meses de 2023, 40. Solo en marzo, una mujer fue asesinada cada 3 días.
“Hay un grave problema en el que todavía los prejuicios y estereotipos contra la mujer siguen afectando al trabajo de policías, fiscales y jueces”, afirmó a EFE Melissa Guillén, vocera de la organización feminista Manuela Ramos.
Guillén y Revollar coinciden en que Perú tiene leyes, mecanismos y protocolos, pero que lo que realmente hace falta es voluntad y conciencia, tanto en la sociedad como en la cadena de personas que atiende a una mujer que denuncia o es agredida.