Los cobardes malvivientes interceptaron a la niña en la vía pública y la despojaron de su teléfono celular. La Policía pudo atrapar a un sospechoso que fue identificado como “Pichulo” Maidana, de 18 años, quien fue atrapado en el capitalino barrio Pirayuí.
Una nena de 12 años fue amenazada con un cuchillo por unos motochorros que le sustrajeron su teléfono celular. El episodio, por demás indignante, se produjo durante la tarde en la ciudad de Corrientes, donde posteriormente fue detenido un sospechoso.
El aprehendido es un muchacho de 18 años, quien fue atrapado en un procedimiento en zona del barrio Pirayuí. Se indicó que se apellida Maidana y es conocido como “Pichulo”.
El accionar estuvo a cargo de la comisaría Octava, ya que el robo se produjo por Gascón y Palermo, intersección a la que pertenece la jurisdicción de la seccional policial.
Alrededor de las 16 del viernes, la menor jugaba cerca de su vivienda cuando dos sujetos en moto se acercaron rápidamente y la arrinconaron, cerrándole el paso con el rodado.
La nena levantó la mirada y vió a los dos malvivientes: uno de ellos sacó de entre sus ropas un cuchillo; acto seguido le ordenó a la nena que entregue su teléfono celular, por lo que la pequeña víctima no tuvo más opción, ante la tremenda situación que estaba pasando.
Una vez que los malvivientes tuvieron el teléfono en su poder, se fueron rápidamente en la motocicleta que abordaban.
Con mucho miedo, la nena fue corriendo hacia su vivienda y le contó a su madre lo que había vivido minutos antes.
Gracias a la progenitora se supo del robo del que fue víctima la menor, lo que derivó en un procedimiento policial para recuperar el teléfono y atrapar a los cobardes motochorros.
Luego de anotar las características físicas de los delincuentes, que la pequeña pudo recordar y describir, los policías emitieron un alerta para intentar atrapar a los malvivientes.
Así es que se emitió una orden en la red interna de la Policía para intentar atrapar a los malvivientes. A la par, agentes de la Octava recorrieron la zona.
La labor logró identificar a un sospechoso, quien tenía las mismas características que uno de los malvivientes y que se encontraba en el barrio Pirayuí.
El informe de la seccional detalló que fue interceptado por calle Frías.
En consecuencia, “Pichulo” terminó en la Octava para investigar si es o no uno de los ladrones que cometieron tan cobarde delito.
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